El fin de la tortura a la que fue sometido Ignacio Lula en Brasil, le permite al líder sindical postularse a la presidencia de Brasil. Este hecho se suma a retorno de Cristina Fernández y Alberto Fernández, Evo Morales, Luis Arce, y ahora Correa y Andrés Araúz.
Lula, ahora representa la imagen del expresidente del Socialismo Siglo XXI, perseguido por el neoliberalismo, que en America Latina ha sido un suceso nefasto, en países como Argentina con Macri, con los presidentes del Perú y Colombia, con Bolsonaro en Brasil y debido a la injerencia descarada de Donald Trump y Mike Pompeo, que no tuvo escrúpulos para reconocer a legisladores que se autodenominaron presidentes como Guaidó en Venezuela o Janine Añez en Bolivia, solo porque no le gustaba Maduro o Evo Morales. Error que nos permite entender que los presidentes de los países del patio trasero de USA , son los que quiere Estados Unidos, y los demás como el de Cuba, Nicaragua, Lula, Evo Morales, o Rafael Correa no pueden ser presidentes, aunque ganen elecciones o sean los humanos mas queridos y populares de esos países.
La libertar de Lula y el juicio al Juez Moro, que sancionó a Lula representa lo impensable en América
Latina, que existan jueces honestos. Desde la Colonia, la justicia fue la sacrosanta aplicación de la ley, y las leyes durante la Colonia eran las peores, las leyes de la Santa Biblia interpretadas al antojo de cada sacerdote torturador o imitador de Torquemada. De los bastardos europeos que se convirtieron en conquistadores, piratas o colonos, que era lo mismo, solo que los piratas eran los bastardos del mar.
Las leyes eran esas que permitían la esclavitud, el asesinato de los indios, la violación de las mujeres, el matrimonio forzado, el aborto o el embarazo obligado, la tortura como forma de obtener versiones, mil formas de hacer culpable a cualquiera de cualquier cosa, y eso que creemos olvidado, o superado en el siglo XXI, desde Guantánamo, hasta las cortes de Ecuador, es rutina diaria que usa la mentira, los falsos testimonios, y hasta los pecados señalados en los 10 Mandamientos, se usan y practican como arma política, o como medio de persecución, de venganza, como en el caso de Lenin Moreno. que además, como lo señala el presidente Alberto Fernández, representa al Efíates ecuatoriano, al Judas de los Andes.
El retorno de Correa, y de Lula a la vida política de Ecuador y Brasil, se ha vuelto un hecho. Su influencia dejó de ser temporal, ahora es indeterminada. Es posible que incluso continue luego de su muerte. Que apresarlos, torturarlos o matarlos, los convierte en inmortales, en los invitados especiales de nuestros dioses a compartir con ellos la inmortalidad, el cielo, que no es otra cosa que la admiración, la gratitud, los buenos recuerdos, que cada uno de nosotros tenemos de aquellos que con su vida y su trayectoria, modificaron el sendero, la visión, e incluso la mision de nuestras vidas.
Es un hecho que si gana Lasso, el banquero bandido, cómplice en la quiebra bancaria de 1999, cuando era el superministro de economía, del fatídico gobierno de Jamil Mahuad, que termino con la moneda nacional el sucre y produjo la peor catástrofe humanitaria que recuerda este país, la emigración de mas de tres millones de ecuatorianos, y que quiere ser presidente, la influencia de Correa, será tal, que lo mas seguro es que su gobierno no dure mas de dos años, aunque los militares, policías y jueces hagan todo lo posible para mantenerlo, como lo hicieron con Lenin Moreno en los tiempos de Donald Trump, que desde la Embajada y las bases norteamericanas de Manta y Galápagos, hacían y deshacía en este país, usando a Moreno como lo que realmente parece y es, una marioneta.
En el gobierno del coronel Lucio Gutierrez, con los militares, los indigenas, los militares y policía ecuatorianos, manejados directamente desde la embajada de USA, que hasta les daba computadoras en calidad de préstamo a la policía, para que llenara todas los records policiales de los ecuatorianos y cuando Correa quiso incautar esas computadoras, el comandante de la policía de inmediato se las devolvió con todo su contenido registrado a la Embajada Norteamericana, que además controlaba el juego de la guerra al narcotráfico, o Plan Colombia, desde la Base de Manta, con tropas norteamericanas y ecuatorianas recorriendo la frontera entre Ecuador y Colombia, a la que a diario las fumigaban con defoliantes como el glifosfato. como si fuera Vietnam, Pero ni el otro amazónico traidor, el Coronel Lucio Gutierrez, que le dijo a George Bush, que era el mejor aliado de EE.UU. , luego de que llegó al poder, gracias a la ayuda financiera de Hugo Chavez, a quien mintió, engaño y traiciono, haciéndole creer que él también haría una revolución como la Chavez en Ecuador, pero ni las enormes marchas de indígenas a su favor, a cambio de que les regalara ovejas o los tenga en cargos públicos. le ayudaron a sostenerse en el poder.
El regreso de Lula y de Correa en Ecuador y Brasil, abre la seria posibilidad de resucitar UNASUR, la Union de Naciones Sudamericanas, a las que Lenin Moreno le quitó la sede en la Mitad del Mundo y se la regaló a la CONAIE, La Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador. Y el renacer del Consejo de Defensa Sudamericano, que fue el que impidió los golpes contra Correa, y Evo Morales orquestados desde la embajada yanqui.
También marca los últimos días de PROSUR, luego de corregir el error fundamental de UNASUR, las decisiones por consenso, PROSUR tiene como fin fundamental atacar al gobierno de Maduro y a los gobiernos del socialismo latinoamericano, progresismo o socialismo SXXI, y facilitar el intervencionismo norteamericano, resucitando la DOCTRINA DEL GAN GARROTE de Theodore Roosevelt.
No hay comentarios:
Publicar un comentario