miércoles, 1 de junio de 2022

El billete de la droga está en Guayaquil, ¿Es la guerra contra las drogas la nueva derrota de USA?






Guayaquil es ahora la Meca del lavado de dinero y el tráfico de drogas en Sudamérica.  De nada ha servicio la presencia de dos bases militares norteamericanas en Ecuador, para evitar o frenar el tráfico de drogas.  
Hoy en Guayaquil es posible encontrar 24 millones dólares en billetes barras de oro y armas sofisticadas  dentro de una casa de un vecino cualquiera, que después se descubre que es un capo de los narco ecuatorianos.
Lo que fue el dinero de las remesas de los emigrantes, luego de la crisis bancaria de 1999, que salvó a las familias ecuatorianas y a la economía nacional, al parecer, hoy lo es el dinero de los narcos,   que permite el movimiento y la reactivación económica de la costa ecuatoriana.
La guerra que libran Estados Unidos, Ecuador y Colombia juntos, contra el narcotráfico, es hasta ahora un fracaso, en Colombia han aumentado las plantaciones, y los laboratorios, en Ecuador, los laboratorios y los narcotraficantes.  
 Ecuador el ahora un puerto  importante de exportación de drogas  y va camino de convertirse en el principal país exportador de drogas del mundo, en tanto Colombia y Perú, siguen siendo los principales países productores de cocaína.
Hace casi 50 años el gobierno de Richard Nixon declaró la Guerra a las Drogas, al mismo tiempo que la guerra anti-subversiva o Plan Cóndor, en América Latina.  El vincular a los subversivos con las drogas, fue parte de la publicidad usada en la guerra mediática contra las FARC, y luego contra los TALIBANES, en Afganistan. A esto se le denominó guerra al narco-terrorismo.
Desgraciadamente  para Estados Unidos, perdió la guerra contra los Talibanes en Afganistán.   Esta narco- guerrilla, demostró que es posible  derrotar a Estados Unidos y la OTAN, hoy los guerrilleros de Colombia, y los sicarios de los carteles de toda America Latina. están demostrando que ellos también pueden derrotar a Estados Unidos, a su DEA , CIA, Seguridad Nacional,  Departamento de Estado, de Justicia, e incluso al Pentágono, con sus marines en Manta, Galapagos, Colombia y Perú.
Esta guerra que actualmente se libra en México, Colombia y Ecuador, es la que está perforando las fronteras de Estados Unidos con túneles, narco-submarinos, lanchas rápidas, avionetas,  e invadiendo ese país mediante olas migratoria incontenibles, de personas que escapan de la violencia.  
Hoy la violencia en Latinoamérica ha   han creado los narcos, carteles y pandillas mas que los gobiernos, esta violencia  es el germen de las olas migratorias, junto a la crisis económica, por la pandemia del covid 19.  
Los narcos  además ayudan a pasar a los emigrantes ilegales  a los Estados Unidos, por los mismo lugares que pasa la droga, a burlarse de El Muro de Trump, la Patrulla Fronteriza o la Guardia Costera, en la que son expertos desde hace 50 años.
La paz, que es el único camino para frenar este baño de sangre que viven nuestros países, y frenar las olas migratorios a los Estados Unidos. 
Pero la paz parte de la legalización del consumo y producción de drogas en los Estados Unidos y en todos los países de America, como un día se hizo con el consumo de alcohol.
La abstención del  consumo de drogas, debe ser una decisión saludable, que cada persona adopta, como el uso de preservativos para no contagiarse de SIDA, que ha sido la mejor forma de prevenir la enfermedad,  o el ponerse las vacunas,para contener la pandemia.
Dejar o rechazar el consumo de drogas  también debe ser una decisión personal, sugerida y respaldada por el estado, luego de que el gobierno informa de manera cierta, y clara los daños que pueden causar las drogas, como lo hace con  el sexo sin precauciones, o la no vacunación.
El usar la guerra a las drogas pata tener bases militares en otros países, controlar los ejércitos,  policías, justicia o medios de comunicación en los países de América Latina,  es inconveniente, porque  si las bases militares, los ejércitos, las policías, la justicia, los medios, o los gobiernos títeres no pueden parar el narcotráfico, crean la oportunidad y dan confianza a los carteles para que pueden derrotar al gobierno norteamericano,  invadir con emigrantes ese país,  multiplicar los drogadictos en USA.  
 Los drogadictos y trastornados mentales son el camino al fin del IMPERIO NORTEAMERICANO,  como lo fue el tener millones de esclavos y deudores de impuestos en el IMPERIO ROMANO.

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