El mal siempre triunfa sobre el bien, pues el bien tiene en su esencia al mal como germen de su autodestrucción.
Esto explica porqué los espartanos, que eran un pueblo de asesinos y ladrones, logró triunfar sobre los griegos, porque los romanos que eran un pueblo de secuestradores de mujeres, ladrones y esclavistas, logró llegar a ser un imperio, o los Unos y Mongoles, Vikingos que eran pueblos de ladrones llegaron a dominar gran parte de Europa y Asia. Los cristianos que originalmente se oponían a los romanos, cuyo principio fundamental era la vendetta o venganza, y el de los cristianos era el perdón, finalmente se convirtieron en los peores asesinos y ladrones transoceánicos del planeta, llevaron la guerras y las pestes a todos los continentes, en especial al llamado Nuevo Mundo, que iba de Alaska a la Patagonia y del Caribe a las Filipinas en el caso español y por todos los continentes en el caso inglés, quienes eran tan malvados, que hicieron de la piratería, del tráfico de esclavos y del trafico de drogas como el opio, el fundamento de su riqueza, de su imperio comercial, o los norteamericanos que convirtieron a la explotación industrial de los seres humanos y a naturaleza, que ahora nos lleva a la pobreza multiplicada, al cambio climático y la extinción de miles de especies.
Lo que ocurre es que que así como en la naturaleza, la destrucción que produjo el fin de eras con la que terminó con dominio de los reptiles, por la emisión de CO2 y gases, por las llamadas Toberas de Siberia, es decir desde el magma de La Tierra, y esto dio paso a los siglos de dominio de los dinosaurios, que dominaron el planeta por millones de años, hasta que un meteoro que cayo en Yucatán terminó con ellos, lo que dio paso a la época del dominio de los grandes mamíferos y estos a su vez a su destructor, el ser humano, que ahora es el destructor de las formas de vida de le precedieron. Posiblemente el ser humano dará paso a virus, nuevas formas de vida, o trastornos climáticos que lo van a expulsar del planeta del que es originario, donde seguramente no podrá volver a habitar, como lo hace ahora, es decir moviéndose por él, sólo con sus capacidades biológicas.
El sistema democrático que inventó los Estados Unidos, basado en elecciones, donde los candidatos provienen de partidos políticos y hacen campañas electorales para venderse como la mejor opción, lleva en su esencia la maldad humana de querer privar a otros seres humanos de poder, riqueza y conocimiento, para concentrarlos en unos pocos. Esto es lo que precisamente lo que hace el socialismo y el comunismo que si bien procura una mejor distribución de la riqueza, concentra el poder en pocos, que deciden por todos los demás, o el ecologismo, que en cambio pretende limitar los poderes, y caprichos humanos, su concentración de privilegios en favor de la vida en el planeta y la sostenibilidad de los seres que en habitan La Tierra, pero que al hacerlo detiene la codicia, vanidad, el consumismo y otros defectos humanos, que han sido el motor de su imaginación, creatividad, o trabajo.
En Ecuador hemos vivido como el mal triunfa sobre el bien, Un buen gobierno como el de Rafael Correa, que procuró una mejor distribución de la riqueza, para lo cual invirtió los recursos del Estado en infraestructura, servicios básicos, reducción de la pobreza, conectividad, educación, salud, justicia, policía comunitaria, cambio de la matriz productiva de combustión a electricidad, sistemas de alerta temprana de desastres naturales como tsunami, terremotos o erupciones volcánicas, capacitación en las 100 mejores universidades del mundo de los mejores estudiantes del país, mas derechos para las mujeres, los discapacitados, las etnias y nacionalidades.
Precisamente esto de dar mas derechos a los discapacitados fue lo que le llevó a creer que Lenín Moreno, un discapacitado, podía ser un buen sucesor, y lo que hizo fue poner a un traidor en el poder, quien a su vez colocó a un banquero, implicado en la peor debacle económica del país en 1999, debacle que lo volvió un multi-billonario, y ahora es presidente. Este nuevo presidente, devuelve cada día a los ricos y sus familias el poder, la concentración de la riqueza, de la información y los conocimientos, nos regresó al siglo XX, en que nos convertimos en uno de los países pobres de La Tierra y hasta perdimos la mitad de nuestro territorio continental original.
Pero además luego de habernos manifestado como un país con autonomía, salir de la llamada Guerra al Narcotráfico, y ser parte de una unidad de países de América del Sur, llamada UNASUR, ahora nos ha sumergido en la peor violencia social de todos los tiempos, porque somos un país narco-exportador, parte de la Guerra al Narcotráfico, donde Estados Unidos, que es el mayor consumidor mundial de drogas, el país donde la droga es el germen de su autodestrucción, arrastra a Colombia, Perú, Ecuador y México, hoy convertidos en los mayores exportadores de drogas del Pacífico y en sus principales proveedores
Este presidente nos está regresando al siglo XX, junto con la pandemia, volvemos a las olas migratorias, a la partidocracia o poder de los partidos políticos, que son agrupaciones que tienen dueño, sea un millonario, como Alvaro Noboa, o Guillermo Lasso, o tienen a caudillos como Abdalá Bucaram y Rafael Correa, que se convirten en la razón de ser de partidos.
Ya no vivimos la época en que los partidos eran una ideología, unos eran comunistas, otros socialistas, otros capitalistas, entonces los ideales eran lo importante, los líderes eran transitorios, pero hoy los partidos nacen y mueren en Ecuador y América Latina con el hombre o mujer que los crea, con el líder que despunta, cuando el hombre muere, mueren de manera rápida o lenta los partidos, porque son hechos a imagen y semejanza de su creador.
En este momento las religiones y los partidos en los países desarrollados pueden vencer la transitoriedad, en la política latinoamericana, se vive lo mismo que en la moda, o en los espectáculos, la idolatría a un ser transitorio, la novelería, euforia momentánea.
Los candidatos de derecha o de izquierda se dan cuenta que lo que les da las victorias electorales no son sus principios ideológicos, sino sus ofertas de campaña, y eso es lo que les permite gobernar si se cumple con las ofertas de campaña y tanto la derecha, como la izquierda pueden proponer lo mismo, si eso suena bonito a los oídos de los votantes si eso les da votos.
Todos los candidatos no importa la tendencia, ofrecen en esta pandemia vacunación, todos ofrecen en esta crisis económica, empleo, todos ofrecen en este deterioro social, lucha contra la corrupción, pero la corrupción es en esencia, la semilla de los sistemas políticos la base de su poder, porque todos los políticos quieren decidir por otros, o forzarlos a hacer algo, controlar, gobernar y ordenar a más y más seres humanos, todos quieren riqueza, esto es disponer de lo propio y de lo que no es suyo, de minas, petróleo, bosques, trabajo humano, etc, y todos quieren tener información confidencial, que les permita tomar decisiones, que otros no pueden tomarlas porque no disponen de esa información. Quieren que su hijos. parientes, y los que llaman colaboradores tengan lo mejor, mejor educación, posibilidades o relaciones que el resto de los habitantes del país.
Pero hasta hasta antes de la Internet, los seres humanos no podían decir lo que piensan o lo que creen, sin que se vean en peligro, o sean discriminados, ahora millones están a diario expresando, diciendo, bromeando, burlándose, criticando a los que tienen el poder y sus decisiones. En esta pandemia hemos vistos que muchos incluso llegan a negarse a vacunar, simplemente porque no se quieren someter a un presidente, a un gobierno, a un consenso, a una razón con la que no están de acuerdo.
Hoy gobernar dejó de ser venderse como candidato, para luego una vez en el poder tomar decisiones por otros seres humanos, que afecta a otros y que estos las acepten sin pestañear, Hoy los seres humanos nos damos cuenta que los gobernantes en su mayoría son mas tontos que nosotros en muchos aspectos, que saben menos que nosotros en muchos aspectos, que son engañados, y que se equivocan mucho mas que nosotros.
Este tomar consciencia de que los gobernantes sólo son individuos con suerte, no con mas capacidades, nos hace sabernos personas, esto es individuos con derecho a decidir por sí mismos en todo, y no ciudadanos, que son los individuos que tienen deberes y derechos, que alguien se los da o se los quita.
Hoy ser ciudadano es ser casi estúpido, obediente, no deliberante, ingenuo, al que antes y durante las elecciones se le puede meter gato por libere, y después de las elecciones se le agradece el voto con impuestos, garrote, leyes que lo asfixian.
Los nuevos humanos del siglo XXI, son personas que tienen consciencia personal, esto es, saben que alimentos, drogas, ejercicios, hábitos, lecturas, compañías, etc, les hacen bien y les hacen mal. Son personas que tienen consciencia ambiental, que se dan cuenta de lo que pasa en el ambiente, en la naturaleza, en el clima, con las especies, con la contaminación, son personas que se dan cuenta quienes son los políticos, los ladrones, los oportunistas, los miserables, los canallas, los traficantes, los corruptos, los traidores, los mentirosos con mas facilidad que sus padres y sus abuelos. Son gente que ya no cree fácilmente de dioses, en partidos, en políticos, o ídolos, que creen cada vez mas en la ciencia, en la tecnología y que creen cada vez mas en sí mismos, este creer en si mismo y poder decidir por cuenta propia en todo, es lo que les hace personas y menos ingenuos, es decir menos ciudadanos.
Las olas migratorias que salían de Ecuador antes eran de personas adultas, sobre todo mujeres desde comienzos del siglo XXI, que soñaban con el regreso y ahora son olas migratorias de jóvenes y niños, que ya no ve su futuro en el país, ni se ven en él. Esta es la señal de que Ecuador y América Latina agotaron el llamado sistema electoral democrático o democracia representativa, porque este sistema de elecciones permite gobernantes incapaces, que complican la vida se sus países y su propia gente. Lo que se viene son gobiernos de poca duración, estabilidad, con poca continuidad, hasta que aparezca una nueva forma de elegir y ser elegidos. Pero las consultas populares frecuentes y la posibilidad de elegir en en todo es el futuro.
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