La religión se convirtió en un culto a las mentiras, cuando inventó dioses fantásticos, y deja de serlo cuando se convierte en un mecanismo de percibir los cambios y el tiempo. Pero en las religiones, los dioses son el centro que define la realidad.
El fundamento de las religiones al igual que la política es la verdad, pero en las religiones existe la llamada verdad eterna, en la política, lo que existe es la verdad transitoria, que es la que pronuncian y en la que creen los gobernantes, sus gobernados, que cambia cuando cambia el gobernante o lo habitantes. En la política el ser humano es el centro que define la realidad.
La politica se convirtió en culto a la mentira, cuando se dedicó a inventar dioses de carne y hueso, a los que llamó reyes, emperadores, presidentes, la diferencia entre uno y otro, estaba en el espacio físico sobre el que ejercían su poder, y el tiempo, pues los presidentes tienen en teoría tiempo limitado para su mandato.
Pero la politica deja de ser un culto a la mentira cuando se convierte en el mecanismo para crear formas de orden en las relaciones humanas, esto es, cuando crea leyes para resolver conflictos, y mecanismos para que esas leyes se cumplan. De esta manera la política canaliza la energía de cada habitante y de todos los que viven en un territorio.
La ciencia y la tecnología que desde siempre fue la antítesis de la religión, pero un gran aliado de la política, lo que le restó credibilidad, es hoy un culto a la materia.
Este culto a la materia, en que los que es perceptible por nuestros sentidos y por las herramientas que inventamos, se convierte en conocimiento, es decir en una verdad de corta duración, que navega en el mar de las dudas, que vive en una metamorfosis constante, es la que nos convierte a los seres humanos en sólo una especie mas del Planeta Tierra, pero que tienen capacidades diferentes a otras especies. Es más, nos convierte en vecinos de otras formas de vida que seguramente deben existir en el inmenso Universo.
Pero la religión y la política todavía tienen mas influencia en la educación y la comunicación humana que la ciencia y la tecnología.
En la educación religiosa, donde lo más importante es la llamada moral, se procura que los estudiantes sean obedientes, no deliberantes, ni críticos pues las llamadas verdades eternas no aceptan la duda, ni la crítica.
En la educación donde la política es el centro de la sociedad, la educación es la repetición y la aceptación del orden, o la disciplina impuesta por el gobernante y su gobierno. Donde los estudiantes aprenden a elegir entre las opciones que el que está en el poder les permite.
En la educación científica técnica, que ahora invade las aulas, o por Internert, cada estudiantes es el descubridor del conocimiento, de sus propias cualidades o virtudes. El papel del profesor es ayudarle en esta búsqueda, como también los es la Internet, los medios o las relaciones sociales. En otras palabras los profesores pasaron de ser guías, a ser acompañantes y consejeros.
El gran problema para los gobiernos es que cada persona tiene diferentes virtudes o cualidades, que estas pueden madurar o llegar a su capacidad de producir, sean bienes tangibles o intangibles como son las ideas, a diferente edad, bajo la influencia de diferentes estímulos, lo que convierte a la producción en serie de bachilleres y profesionales universitarios en las llamadas escuelas de NI -NIS jóvenes, que ni estudian ni trabajan y a los profesionales universitarios en peregrinos de empleos, trabajos o lugares, muchos de los cuales no son compatibles con sus cualidades, virtudes, experiencia o conocimientos.
Hoy la educación en los países del tercer mundo se ha convertido en la principal fábrica de emigrantes, que en un principio eran emigrantes del campo a la ciudad y ahora es de países pobre a países ricos,
Este fenómeno es similar al que produjo la iglesia católica desde el año 1000 de nuestra era, en que primero se volvió en una fábrica de cruzados, es decir de soldado fanáticos cristianos, que iban a matar musulmanes en Jerusalem y Oriente Medio, y luego en una fábrica de conquistadores, piratas, traficantes de esclavos y colonos europeos.
La llamada educación politica, es la creadora de guerrilleros, soldados, empresarios, profesionales, obreros, campesinos, pescadores que procuran la sobre explotación de la naturaleza y de otros seres humanos hasta que el clima y la extinción los afecta.
Pero la novedosa educación y comunicación cientifico-técnica que ahora nos invade, procura que los seres humanos aprendan a tolerarse entre sí, con sus diferencias. Las diferencias han pasado a ser lo mas valioso de la especie, empezando por las diferencias genéticas, que nos permiten mejores defensas inmunológicas, hasta las diferencias culturales, que nos permiten conocer plantas medicinales, rituales curativos, alimentos, o formas diferentes de relacionarnos con diferentes espacios geográficos, como por ejemplo el Artico o la Amazonía.
Pero además esta nueva educación científica técnica nos permite mayor capacidad de asombro, de curiosidad, de análisis, de comprensión, de exploración, de búsqueda, de inventiva, donde los seres humanos se convierten cada uno en una maravilla de este planeta, y dejamos atrás el culto a dioses, ídolos, gobernantes y ejemplos humanos a seguir, para convertir a cada cerebro y cuerpo humano en algo extraordinario.
Pero estamos tambien viviendo el culto a sí mismo, este culto empieza por lo propaganda de shampoos para el cabello, el gimnasio, la cirugía estética, la dieta, las vitaminas y medicinas, los placeres, la diversión, la droga, que nos convierte a nostros mismos en una mentira.
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